Cada vez que se produce el lanzamiento de un nuevo móvil se pueden ver mejoras de todo tipo: la cámara con autofocus y flash, pantallas táctiles enormes, mayor resolución, mayor conectividad…¿y la videollamada?. Fue un boom hace un par de años la realización de llamadas de vídeo. Incluso las compañías no hacían más que regalar minutos para cazar más clientes. Pero está llegando a su fin. Todos los nuevos teléfonos móviles que se lanzan (como los iPhone, Android, Xperia…etc.) carecen de esa pequeña cámara anterior de baja resolución. La verdad es que era un método gracioso. Pero más por la novedad que por la utilidad. Ahora ya se pueden conectar muchos teléfonos como webcam mediante la cámara de fotos. Además, con las redes sociales es más rápido colgar una foto o un vídeo en nuestros perfiles y que lo vean de una vez todos los amigos, que llamar a algún contacto y hacer de reportero.
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Fue un boom de marketing, que no en su uso. Pero creo que por una cuestión básicamente cultural, (¿invasión de la intimidad?, algo de esto ha tenido que ver). Creo que a esto se le sumó inicialmente una errónea política de precios que lastró su desarrollo (ahora subsanado). Y por último, un nivel de calidad discreta debida a la limitación en su protocolo, 3G-324M: máx 64 k/bits).
Pero lo que hoy se puede ver como un fracaso es muy probable que de aquí poco (1-2 años) se pierdan los prejuicios, y se imponga su uso como una forma natural de comunicación.
Puede que tengas razón. El problema estriba en que los móviles de última generación apuestan simplemente por el uso de internet y la comunicación por videollamada ha quedado en un tercer plano por debajo de las llamadas a voz. Gracias por el comentario y por explicar la limitación del protocolo 3G-324M.
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