Parece ser que esa parte de DNA que antes se creía «basura» sigue teniendo cada vez más importancia. Ahora se ha descubierto que la contracción muscular está regulada indirectamente por microRNAs. Estos microRNAs actúan a nivel de la expresión de genes reguladores del flujo sanguíneo, el cuál es necesario para la contracción.
Cada día me maravillo más con la naturaleza.
Fuente – PhysOrg.com
Escuchando: PuroMac nº150