Tenía ya escritas unas palabras el día que llegué, pero creo que no las voy a poner porque parecería desfasado. Lo único que quiero recordar es el vuelo. Era la primera vez que cogía un avión. Y encima desde la T4. Alucinante!!. Podemos estar orgullosos los españoles de esa pedazo de Terminal. Y el avión, muy bien. Me tocó ventanilla. Pero como si no, porque había pared en mi asiento.
¡Estoy genial!. La gente aquí está muy preparada para acoger "foráneos". Además el tiempo acompaña mucho. Hace mejor que en España. Y en el trabajo, mejor. Estoy aprendiendo bastante. Y sólo llevo 2 días. Puede ser que mañana me lleven a Budapest, pero eso será después de salir de currar. Sí, habéis leído bien. Los sábados se trabaja.
Bueno, me piro. Que tengo a Carmen (una de las currantes rumanas en Hungría) esperándome para seguir con un protocolo.
See youu
Escuchando: El ruido de los arcones de -80ºC