Desde pequeños la limpieza de los dientes ha sido algo que nos ha preocupado bastante. Sobre todo a la hora de irse a la cama y saber que no se han dejado las perlitas de la boca como los chorros del oro. La gingivitis es una de las enfermedades infecciosas bucales más comunes. En Estados Unidos más de la mitad de la población ad ulta sufre esta inflamación y s angrado de las encías. No olvidemos que es producida por una infección bacteriana producida por la falta de higiene bucal. Sí: hay que lavarse los dientes, porque se sabe que puede originarse con tan sólo 3 días sin sanear la boca.
Después de un pequeño repaso de la enfermedad, lo curioso es que se ha realizado un estudio en la Universidad de Carolina del Norte (Estados Unidos) para desentrañar los posibles mecanismos moleculares que se esconden tras este mal. Se ha realizado una búsqueda exhaustiva mediante la tecnología de Chips de ADN conjugados con importantes desarrollos bioinformáticos, y los datos de expresión obtenidos demuestran que alrededor de 9000 genes intervienen en el desarrollo de la enfermedad. Estamos hablando de un 30% de los genes humanos. No es de extrañar ya que es una infección y, por lo tanto, se desencadenan cascadas de procesos bioquímicos en masa para combatirla: respuesta inmune, metabolismo energético, procesos neuronales y vasculares…etc. Según los investigadores, será posible analizar esos genes que sean decisivos para el desarrollo de la enfermedad y tratarla de forma dirigida.
Los odontólogos ya pueden quitarse un poco del peso de encima y pasárselo a la ciencia. A ver si entre todos conseguimos sonrisas «profident».
Fuente: The University of North Carolina